Evaluación Inicial

La consulta comienza con una revisión detallada del historial médico del paciente, enfocándose en síntomas relacionados con arritmias, como palpitaciones, mareos, desmayos, o dolor en el pecho. El médico también indaga sobre el historial de enfermedades cardíacas, condiciones crónicas (como hipertensión o diabetes), y antecedentes familiares de problemas de ritmo cardíaco. Es crucial comprender el impacto de los síntomas en la vida diaria del paciente para determinar la gravedad del problema.

Examen Físico

Durante el examen físico, el electrofisiólogo realiza una evaluación general del estado cardíaco del paciente. Se escucha el ritmo del corazón con un estetoscopio para detectar irregularidades en el ritmo o la frecuencia cardíaca. También se puede realizar un electrocardiograma (ECG) para registrar la actividad eléctrica del corazón en ese momento y detectar posibles arritmias.

Pruebas Diagnósticas

Para un diagnóstico preciso, el electrofisiólogo puede solicitar diversas pruebas y estudios que proporcionen una visión detallada de la actividad eléctrica del corazón:

• Electrocardiograma (ECG): Registra la actividad eléctrica del corazón para identificar arritmias y alteraciones del ritmo.
• Monitoreo Holter: Un dispositivo portátil que el paciente lleva durante 24-48 horas para registrar la actividad cardíaca continua y detectar arritmias que no se presentan durante un ECG estándar.
• Estudio electrofisiológico (EP): Un procedimiento invasivo en el que se introducen catéteres en el corazón a través de venas o arterias para mapear la actividad eléctrica y localizar el origen de las arritmias.
• Prueba de esfuerzo con ECG: Evalúa la respuesta del corazón al ejercicio y puede revelar arritmias que se manifiestan bajo estrés.

Diagnóstico y Plan de Tratamiento

Con los resultados de las pruebas, el electrofisiólogo determina el tipo de arritmia y la mejor opción de tratamiento. El enfoque puede variar desde la gestión médica hasta intervenciones más específicas. Las opciones de tratamiento incluyen:

• Medicamentos antiarrítmicos: Para controlar y prevenir arritmias mediante la regulación del ritmo cardíaco.
• Cardioversión: Un procedimiento que utiliza una descarga eléctrica para restablecer un ritmo cardíaco normal en casos de arritmias graves como la fibrilación auricular.
• Ablación con catéter: Un procedimiento mínimamente invasivo que utiliza energía para destruir áreas del corazón que están causando arritmias, restaurando un ritmo normal.
• Marcapasos o desfibrilador cardioversor implantable (DCI): Dispositivos que se colocan en el cuerpo para regular el ritmo cardíaco y tratar arritmias potencialmente peligrosas.

Seguimiento y Manejo a Largo Plazo

El seguimiento es esencial para monitorear la efectividad del tratamiento y ajustar la terapia según sea necesario. El electrofisiólogo realiza controles periódicos para evaluar la evolución del ritmo cardíaco del paciente, gestionar cualquier efecto secundario de los medicamentos, y asegurar que los dispositivos implantados funcionen correctamente.

La consulta de electrofisiología es crucial para el manejo de trastornos del ritmo cardíaco, ofreciendo una evaluación detallada y un tratamiento especializado que mejora la calidad de vida y reduce el riesgo de complicaciones graves asociadas con arritmias.